Para el crecimiento saludable, las plantas no sólo necesitan agua, sino también nutrientes. Qué podría ser más obvio que obtener estos nutrientes del medio que de todas formas se acumula en la granja en grandes cantidades: el estiércol líquido.
Para ello, es necesario contar con un equipo bien diseñado que apoye el proceso de transformación del estiércol, lo separe en componentes reutilizables y los transporte de forma sencilla hasta el lugar donde el estiércol puedan desarrollar todo su potencial. Rentable y, al mismo tiempo, respetuoso con la naturaleza.
En Bauer, pensamos en la cadena del estiércol de principio a fin, desde la mezcla y el bombeo, hasta la separación, el transporte y la distribución en el campo. Así es como creamos soluciones de sistemas eficientes y de alta calidad para todo el complejo del estiércol. Porque lo sabemos: El estiércol líquido es oro.
