También en Austria las temperaturas superan con creces los 30° C en verano. Un sistema de riego automático y fiable que utilice el agua y el diesel de forma extremadamente económica vale su peso en oro. Markus Quidenus, de Untersiebenbrunn (Baja Austria), confía al 100% en su BAUER Linestar 168 EL.
Markus Quidenus es ya la cuarta generación que dirige la empresa familiar, fundada por su bisabuelo en 1935 en el corazón de la región de Marchfeld. En la actualidad, la empresa ecológica ocupa una impresionante superficie total de 190 hectáreas, en las que se cultivan cereales, maíz, soja, girasoles y guisantes verdes, según la rotación de cultivos.
Un riego fiable es indispensable para la agricultura moderna. Hasta hace dos años, dos carretes enrolladores Bauer (Rainstar E51 y E55) se encargaban de ello en la finca de la familia Quidenus. En 2020, la flota se amplió con un Bauer Linestar 168 LL. De mayo a septiembre, el sistema de baja presión de 900 m de longitud riega 3 parcelas de 28 hectáreas cada una de forma totalmente automática. Debido a la grave sequía de este año, hubo que empezar a regar incluso en abril.
Guiado con precisión por cables tendidos bajo tierra, motores de 0,5 KW tiran del sistema linealmente por el campo. Cuando es necesario, los motores se encienden para avanzar; la óptima distribución del peso hace que apenas haya presión sobre el suelo digna de mención. Las boquillas de baja presión producen una resolución de gota fina, lo que se traduce en una gran precisión de distribución y un riego suave de las plantas. Los sistemas de baja presión también impresionan por su eficiencia energética: solo se necesita una presión de entrada máxima de 3,5 bares para suministrar el agua.
Markus Quidenus se muestra entusiasmado por el considerable ahorro en tiempo de trabajo y diesel, un aspecto más que satisfactorio a la vista de la actual evolución de los precios del combustible. "El hecho de que el Linestar requiera casi dos tercios menos de diesel que un carrete autoenrollable realmente me sorprendió. Además, ahorramos unas 20 horas de trabajo al regar una parcela. Calculado a lo largo de toda una temporada, es una suma considerable", explica Quidenus.
Además, el sistema lineal está equipado con la aplicación "SmartRain", compatible con GPS. Gracias a las actualizaciones periódicas en directo, siempre estará informado sobre el estado actual del Linestar. Para Markus Quidenus, se trata de una ventaja inmensa: "Basta con echar un vistazo al smartphone para saber si se mantiene la velocidad fijada, si la precipitación es la adecuada o cuánto tiempo le queda a la máquina para llegar a la siguiente estación intermedia."